La localidad asturiana de Pola de Laviana celebró el pasado fin de semana las I Fiestas de la Chalana, donde Anabel ofreció un concierto en la noche del sábado 24.
El concierto tuvo lugar en el "Prado de La Chalana" y ya en la prueba de sonido pudimos vislumbrar que aquella iba a ser una noche especial en la que íbamos a disfrutar y a emocionarnos una vez más.
Comenzó pasadas las 00.30 horas, Anabel divina como siempre, lucía una falda toda ella de flecos negros, una camiseta gris con adornos y dibujos por la parte delantera, todo ello complementado con un cinturón negro ancho de círculos, unos zapatos a juego de tiras abotinados y el pelo en un recogido alto.
Escogió un repertorio de seis de sus mejores temas, comenzando con:
- Hasta llegar a enloquecer: Una canción que realiza de tal manera que comienza casi recitada y va aumentando de intensidad poco a poco para acabar dejándonos a todos los allí presentes enloquecidos y deseando volverla a escuchar una y otra y otra vez.
- Café Café: La rumbita que no puede faltar, ya venga desde Cuba, Colombia o la misma Córdoba. Es un tema idóneo con el que animó al público consiguiendo que empezara a entrar en calor en una noche un poco fresca para finales de Julio, donde además de gozar de la voz de Anabel, nos obsequió con todo el arte que desprende en esos bailes con los que acompaña a la canción.
- Ahora quién: ¿Y qué puedo contar de este tema?, una de las grandes baladas de Marc Anthony, pero que nuestra artista ha personalizado de una manera que lo lleva completamente a su estilo convirtiéndolo en una canción diferente. Con una voz y un sentimiento que conmovió y llegó al alma de todos los presentes. Y fue en ese momento cuando empezamos a ser conscientes de que estábamos presenciando algo grandioso.
- Otro amor vendrá: Un público difícil que ya con este tema acabó rendido a sus pies, donde se ganó una nueva y gran ovación muy bien merecida, porque Anabel interpretó este tema de manera sublime, una canción que va desde las notas más bajas hasta las más altas, que nuestra artista bordó a la perfección regalándonos unos agudos que erizaban la piel.
- En mi soledad: Otra gran balada, magnífico tema donde los haya, con el que Anabel nos deleitó con su gran voz y sus movimientos marcando los golpes de la música y con una terminación que hace de manera muy personal y emotiva.
- El punto de partida: Tema de la gran Rocío Jurado que no puede faltar en un concierto de nuestra artista. Anabel puso el broche de oro con esta canción, una canción que no se canta, se vive y que ella interpreta de tal manera, que hace que todos los presentes sintamos la agonía de ese amor perdido que nunca regresará. Además de inyectarle un chorro y unos agudos que te dejan petrificado.
En definitiva una noche inolvidable donde Anabel, además de demostrar una vez mas su valía, supo ganarse a un público en principio apagado y frío, pero que acabó ovacionando y seguramente emocionado con el recital de voz y arte que nos regaló.
El concierto tuvo lugar en el "Prado de La Chalana" y ya en la prueba de sonido pudimos vislumbrar que aquella iba a ser una noche especial en la que íbamos a disfrutar y a emocionarnos una vez más.
Comenzó pasadas las 00.30 horas, Anabel divina como siempre, lucía una falda toda ella de flecos negros, una camiseta gris con adornos y dibujos por la parte delantera, todo ello complementado con un cinturón negro ancho de círculos, unos zapatos a juego de tiras abotinados y el pelo en un recogido alto.
Escogió un repertorio de seis de sus mejores temas, comenzando con:
- Hasta llegar a enloquecer: Una canción que realiza de tal manera que comienza casi recitada y va aumentando de intensidad poco a poco para acabar dejándonos a todos los allí presentes enloquecidos y deseando volverla a escuchar una y otra y otra vez.
- Café Café: La rumbita que no puede faltar, ya venga desde Cuba, Colombia o la misma Córdoba. Es un tema idóneo con el que animó al público consiguiendo que empezara a entrar en calor en una noche un poco fresca para finales de Julio, donde además de gozar de la voz de Anabel, nos obsequió con todo el arte que desprende en esos bailes con los que acompaña a la canción.
- Ahora quién: ¿Y qué puedo contar de este tema?, una de las grandes baladas de Marc Anthony, pero que nuestra artista ha personalizado de una manera que lo lleva completamente a su estilo convirtiéndolo en una canción diferente. Con una voz y un sentimiento que conmovió y llegó al alma de todos los presentes. Y fue en ese momento cuando empezamos a ser conscientes de que estábamos presenciando algo grandioso.
- Otro amor vendrá: Un público difícil que ya con este tema acabó rendido a sus pies, donde se ganó una nueva y gran ovación muy bien merecida, porque Anabel interpretó este tema de manera sublime, una canción que va desde las notas más bajas hasta las más altas, que nuestra artista bordó a la perfección regalándonos unos agudos que erizaban la piel.
- En mi soledad: Otra gran balada, magnífico tema donde los haya, con el que Anabel nos deleitó con su gran voz y sus movimientos marcando los golpes de la música y con una terminación que hace de manera muy personal y emotiva.
- El punto de partida: Tema de la gran Rocío Jurado que no puede faltar en un concierto de nuestra artista. Anabel puso el broche de oro con esta canción, una canción que no se canta, se vive y que ella interpreta de tal manera, que hace que todos los presentes sintamos la agonía de ese amor perdido que nunca regresará. Además de inyectarle un chorro y unos agudos que te dejan petrificado.
En definitiva una noche inolvidable donde Anabel, además de demostrar una vez mas su valía, supo ganarse a un público en principio apagado y frío, pero que acabó ovacionando y seguramente emocionado con el recital de voz y arte que nos regaló.
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